Verona, lunes de carnaval

Hoy es lunes y no solo es carnaval en la vecina Venezia.

Verona también tiene sus encantos carnavalescos, con sus tradiciones y personajes de otra época que llenan de colorido la ciudad durante estos días.

Aprovechando el lunes de puente, vamos a salir de paseo, a perdernos por la ciudad. El vuelo sale a media tarde, lo que nos permite ganar casi un día entero. Como ya hemos visitado todos los puntos de interés que vienen en las guías, webs y blogs de turismo, vamos a ver qué más nos depara la ciudad esta mañana. Aunque hemos dejado para la tarde un par de monumentos turísticos que no podemos dejar de visitar.

Atravesamos el Puente Scaligero, siempre muy concurrido a cualquier hora del día. Desde aquí, las torres de la Fortaleza Scala de Castellvecchio se ven en todo su esplendor. Hay unos escalones en el muro para sentarte a tirar unas fotos fantásticas, amenizadas por la música de los artistas callejeros.

Vamos a perdernos por el otro lado del río, a ver qué encontramos. Pues justo de frente, está este antiguo cuartel, que ahora está para hacerle una intensa reforma por dentro, pero tiene un potencial enorme. La fachada sigue intacta.

Delante hay parque infantil. Hacemos una breve pausa para tomar un cortado, en la terraza de la cafetería ¡qué gusto de sol!

Este lado del río es una zona residencial muy tranquila.Vamos andando por el paseo de la rivera del río. Es un lugar estupendo para salir a correr o dar un paseo con una vistas fantásticas. Hay muchísima gente haciendo deporte a estas horas.

Atravesamos la ciudad por la Piazza Bra. En un lateral antes de llegar, hay una pasticceria estupenda para comprar "le sòssele", una delicia típica de carnaval. Siempre hay que sacar un rato para degustar los dulces italianos, las pastelerías y tiendas de dulces son parada obligada en toda Italia. 

Dimos buena cuenta de ellas, que se compran al peso.

Durante el fin de semana hay muchísimas actividades de carnaval por toda la ciudad. Los disfraces no son del estilo veneciano, tienen un origen medieval, pero tienen otro encanto. Al cruzar el río, nos encontramos con mucha gente disfrazada.

Pero, sin duda, el que más nos llamó la atención, por original fue este  "il Papá del Gnoco" el personaje principal del Carnavale di Verona. En vez de llevar un bastón de mando, porta un tenedor coronado por un gnoco. En el desfile del domingo reparte caramelos a los niños. Es toda una institución en la ciudad.

Descubrimos este local de casualidad, paseando por esa calle oscura el otro día y estaba super lleno. Así que ya estaba en nuestro punto de mira. Hoy comemos en horario italiano, que es una hora antes para nosotros. 

El local es bastante bonito, muy bien decorado y muy grande.El personal muy atento, la verdad. Mucha variedad para elegir, difícil decisión, al final risotto al vino tinto que estaba fabuloso.

Y no te digo nada de la pasta de verdura con setas, tremenda. Un gran acierto este sitio. La relación calidad- precio también. Nos tomamos un café y seguimos de paseo.

Otro punto de interés, menos conocido y visitado es la casa de Romeo. Pero ya que fuimos a ver la de Julieta, pues como no vas a ver la suya. Sólo está indicada con esta señal, que puede ser la de cualquier calle del centro.

Como es propiedad privada y no se puede visitar, pues lo encuentras si lo vas buscando. No sabemos cómo estará de conservada por dentro, el exterior está bastante bien, como todas las casas del centro histórico de Verona.

Al lado de la casa de Romeo está Arche Scaligere, un monumento funerario del siglo XIV.

Son cinco tumbas góticas muy originales en su diseño. Están situadas en el atrio de la iglesia de Santa María Antica. Después de ver estas tumbas para nobles en la calle, la expectativa de la iglesia era muy alta. Entramos y es todo lo contrario, muy sencilla.

Así que no os perdáis ningún detalle desde fuera, que son dignas de admirar un buen rato. De noche son mucho más lúgubres, muy acorde con su estilo gótico.

Pasas el arco y vuelves a estar en la Piazza de Dante, aprovechamos para hacer unas fotos con luz, que tiene otro aspecto la verdad sea dicha. Aunque siguen con la reforma del edificio de al lado, por lo que no pudimos sacar la plaza completa.

Monumento a Dante, muy presente en la historia de la cuidad.

No nos podíamos marchar de Verona sin dar una vuelta por las compras, que es lunes y aquí está todo abierto. Además de ver los monumentos, es siempre un valor añadido en los viajes, unas buenas tiendas. Y aquí puedes pasar un buen rato, porque hay para todos los presupuestos. Desde el glamour mas glamuroso.....

Estas dos valen como ejemplo, bien conocidas por todas.......

A las más comerciales como la mundialmente famosa, Zara, en la misma calle. A destacar como visita obligada, por ser italiana, la tienda de Benetton, por diseño y espacio.

Para acabar la tarde nos vamos a merendar, café y bollo o lo que encontremos en esta cafetería que ya solo la entrada es de cuento. El interior muy cuidado y con cola para poder sentarse.

Se acabó el tiempo, nos vamos al hotel a por las maletas, que hay que coger el bus, el avión y de vuelta para casa, con los deberes cumplidos. Sin duda, volveremos.